Amor y Pecas

¡¡Tienes un Email!!

Título original: You’ve Got Mail

Nora Ephron, 1998
*Imagen tomada de internet

Es curioso que, tanto hombres como mujeres que están en una relación amorosa, en algunas ocasiones buscan formas de encontrar “inspiración” por fuera de ella y sin darse cuenta forman un vínculo con otras personas incluso sin conocerse personalmente, como es el caso de la película *Tienes un email*.

Me llama mucho la atención los dos protagonistas, pero me centraré en ella, kathleen. Es una mujer independiente, hermosa, inteligente, con un trabajo que le encanta, entre otras cualidades… por lo que uno se pregunta ¿por qué sigue al lado de un hombre que la aburre, un hombre con el que no termina de conectar, con quien no disfruta el tiempo que comparten? Así que teniendo la posibilidad de estar sola y coincidir con alguien más, ¿por qué sigue ahí? ¿será temor a herirlo porque sus sentimientos ya no son los mismos?, ¿miedo a estar sola?, ¿será la costumbre? ¿miedo a comenzar de nuevo?, ¿temor a no encontrar a alguien más?, ¿sentimiento de compromiso por el tiempo que han estado juntos?… Y puedo seguir haciendo una larga lista con todas las posibilidades que pueden pasar por la cabeza no solo de una mujer, si no de cualquier persona en una situación similar.

A lo que quiero llegar es… ¿será que de no haber sido por el hombre con el cual conversaba a través de la plataforma –Tienes un email- no hubiera tenido la valentía para cerrar ese capítulo en su vida? La verdad es que es una posibilidad muy real.

Pienso que si te encuentras en una relación sentimental como la de nuestros protagonistas, donde no eres feliz, donde no disfrutas el compartir con tu pareja, donde no te sientes especial, valorado, amado tan apasionadamente como te mereces te invito a que la termines, a que no te conformes y tomes las riendas de tu vida amorosa y le des el valor que se merece; definitivamente no tienes que tener otra opción cerca que te motive a hacerlo. ¡NO! Termínala por ti, porque reconoces que no estás siendo amado como te mereces y que en definitiva no estás amando como se merece la otra persona, porque ambos merecen ser felices y hacerse mucho bien.


No pierdas tiempo, libérate de esos ciclos que no te permiten avanzar hacia el amor que deseas y mereces.


Con amor y pecas,

Sheyla.

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