La Boda (-The Weeding– título original)
-Nicholas Sparks, 2003-
“…Experimento esa misma sensación (déjà vu) casi con todos los recuerdos que puedo evocar. Si pienso en la Navidad, te veo sentada al lado del árbol, radiante de felicidad, entregando los regalos a nuestros hijos. Cuando pienso en las noches de verano, siento la presión de tu mano en la mía cuando caminábamos bajo las estrellas. Incluso en el trabajo, a menudo me sorprendo mirando el reloj y preguntándome qué estarás haciendo en ese preciso instante… Supongo que lo que intento decirte es que estás ahí, en todo lo que soy, en todo cuanto he hecho, y al rememorarlo sé que debería haberte dicho cuánto has significado siempre para mí….”
Ya les había recomendado este libro, pero no podía dejar de escribir sobre él, porque en muchas ocasiones y quizás a causa del tiempo, de compartirnos, de conocernos más, de pasar a otros niveles en la relación es que callamos lo que sentimos, pasamos por alto expresar y manifestarle a nuestra persona favorita cuánto significa para nosotros, porque estamos tan seguros de su amor, de su elección y de la nuestra, que equivocadamente pensamos que no es necesario decirlo, que ya lo sabe, pero no es así, nunca será suficiente expresar y demostrar nuestro amor, porque siempre será necesario reafirmarnos, desde acciones pequeñas como darle un gran beso al verla, caminar tomados de las manos, coleccionar atardeceres, compartir una película o hasta permitirnos sorprender con grandes regalos inesperados y románticos, como un spa para dos, un viaje, una cena en casa preparada por nosotros, un masaje después de un día agotador, una serenata, entre otros.
Este fragmento me recuerda la belleza detrás de observar a nuestra pareja en silencio, son momentos donde nos dejamos sorprender, donde nos permitimos apreciar de una forma quizás más sincera todo lo que es esa persona en su individualidad y en su relación con nosotros, reconociendo así, en ese silencio, cuánto admiramos y amamos a esa persona.
De modo que es importantísimo disfrutar de esos silencios, pero es aún más importante reafirmar ese querer con palabras/acciones, como se menciona en la novela <la vida sigue> “…hacer un movimiento que merezca, que perfeccione el merecimiento de estar con esa persona…” Así que este artículo es también un recordatorio para que no des nada por sentado y a que tomes cartas en el asunto de mantener viva la chispa y de demostrarle a tu amor todo lo que significa para ti, para que nunca llegues demasiado tarde a esta conclusión.
Y este libro es amor. Es una visión natural de nuestras elecciones, del matrimonio, de cómo la monotonía puede llevarse momentos únicos, de cuánto puede deteriorarse el amor aún queriendo demasiado, pero es también un ejemplo de compromiso, de lealtad, de reafirmación, de cómo el amor puede vivir en un corazón y mantenerse firme a través de los años, porque hasta la persona más anti-romántica puede ser muy romántica por la persona amada.
Por favor déjate sorprender por este libro.
Que no te gane la pena, exprésale a tu persona favorita todo lo que ves en ella, cuánto la quieres y cuánto agradeces su presencia en tu vida.
Con amor y pecas,
Sheyla.
