Cuando florece mi amor
Serie surcoreana, 2020
Hay una escena en esta serie en el que la pareja después de una discusión se aleja y al reencontrarse deciden que se siente feo pelear entre ellos, así que el chico propone que no peleen y si están por hacerlo, levanten la mano derecha, avisándole al otro que está enojado y que podría terminar en pelea, para poder parar y después hablar con calma.
Me pareció muy lindo porque el amor no está exento de malentendidos, discusiones y algunas subiditas de tono. Y es normal. Somos humanos, nos equivocamos, sentimos miedo, dolor, ira e impotencia, y todos estos sentimientos se multiplican al tratarse de nuestra persona favorita, porque lo sentimos directamente en el corazón.
Hay muchas anécdotas sobre eso, como que… lo mejor de discutir es la reconciliación, que claramente tiene una alta dosis de erotismo y sensualidad. Pero, a veces, lo que se hace es tapar aquel desacuerdo, aquel incidente con un momento de intimidad que aunque satisfactorio, deja un sin sabor. Así que mirémoslo desde dos puntos.
Primero: evitar llegar al punto de no retorno. Es aquel en que por el calor del momento se dicen cosas tan fuertes, que en muchas ocasiones ni siquiera es lo que se piensa, pero que una vez dichas no se puede volver atrás, dejando una marca en la mente y en el corazón de la pareja, difícil de olvidar.
Segundo: cuando han tenido discusiones… ¿tienen la costumbre de que alguno de los dos busca la forma de conversar nuevamente y crear el espacio para hacerlo? O por el contrario, ¿dejan que pasen las horas, los días y que se vaya disolviendo con el tiempo?
En el caso de que sea la primera opción, ¿tienen algún “ritual”? Como del tipo, tenemos una banderita blanca y quien quiera dar el primer paso la toma y se acerca al otro, o una camiseta/postre de las reconciliaciones, etc. Si no la tienen, puedes considerar implementar alguna, le quita un poco de tensión al momento y crea más complicidad.
Si es la última opción, no pueden continuar de esa forma. Con esa actitud incrementan la sensación de no ser escuchados ni valorados, entre otras, así que ten presente lo siguiente, cortesía de la escritora Megan Maxwell de su libro <adivina quién soy esta noche>:
El primero en pedir perdón es el más valiente
El primero en perdonar es el más fuerte
El primero en olvidar es el más feliz
Estar realmente en una relación de pareja, implica involucrarse y compartir los buenos y especialmente los malos momentos. El amor más que dar, es quedarse y trabajar juntos para que se consolide. ¡Recuérdalo!
Con amor y pecas,
Sheyla.
